Leer, como una persona, en este caso, Kleber o Clever Molina ha ido forjando su vida desde la pobreza, la distancia de la urbe cuencana, reconforta el alma y nos da esperanza para seguir adelante.
Cuánto valor se puede ver en sus escritos que da a sus padres, a sus estudios, a su familia, a su trabajo. No hay vergüenza al contar su infancia cuando corría por las calles polvorientas de su querida parroquia Checa, pero siempre feliz.
Deja así, al descubierto Kleber que el esfuerzo y perseverancia, es el mejor camino al éxito. Hoy Kleber es un gran profesional, con una amplia trayectoria en el exterior, donde sus hijas, su esposa son el pilar para su desarrollo.
Cuánto hace ver el esfuerzo de un ecuatoriano que nunca se cruzó de brazos y se transformó en un ejemplo para quienes sueñan con lograr un éxito fuera de su tierra.
Este libro es un compendio de los triunfos que podrían alcanzar las personas que se proponen, como Kleber, a saltar obstáculos, por más difíciles que sean sin esperar que los gobiernos les ayuda. Él muestra que cada problema puede ser resuelto mediante su propio esfuerzo y que el éxito está al alcance de todos.